Hoy el movimiento 6 de abril ha convocado junto a los partidos de la oposición una nueva manifestación, en la que esperan reunir a más de un millón de personas para conseguir definitivamente la marcha de Mubarak. Quieren hacerlo de manera festiva, convertir la manifestación en una fiesta contra Mubarak. "Queremos hacerlo que sea como un carnaval, con música, canciones, poesías y espectáculos, todo centrado en pedir la renuncia de Hosni Mubarak". El lema será "Abajo Mubarak, todos contra Mubarak", y la protesta está previsto que arranque este mediodía. Un periodista de France Presse informa de que los alrededores de la plaza de Tahir, epicentro de la revuelta que se prolonga ya ocho días, se están llenando de manifestantes desde primera hora, que empiezan a llegar al lugar desde donde se iniciará la gran protesta. Según la cadena de televisión Al Yazira, el número de manifestantes reunidos en Tahrir es sensiblemente superior al de los días anteriores de protesta.
Mubarak está desesperado, pese al toque de queda, sacar el ejército con los tanques a la calle, bloquear el acceso a internet y móviles, cerrar las oficinas de prensa de Al-yazzira, pese al cambio de gobierno, las promesas de democratización y ofrecerse a pactar con la oposición, la gente no desiste y es clara: quieren que se marche. Que abandone el país después de 30 años de dinastía, la cual pretendía continuar en la figura de su hijo Gamal.
Sin duda la suerte ya está echada para Mubarak, el ejército ya ha comunicado que no respalda al que iba a ser su posible sucesor y que respalda la demanda de los manifestantes proclamando que los militares no emplearán la fuerza contra los manifestantes. "Las Fuerza Armadas no han utilizado ni nunca utilizarán la fuerza contra nuestro gran pueblo. La presencia del Ejército en las calles es para garantizar vuestra seguridad. Las Fuerzas Armadas son conscientes de vuestras legítimas demandas. La libertad de expresión de manera pacífica es aceptable, pero hay que evitar que el país se desestabilice", decía el comunicado castrense, que fue recibido con alegría entre los manifestantes que continúan en la plaza Tahrir, en el centro de El Cairo.
Estos días también han saltado a las noticias, saqueos, asaltos, a comercios, comisarias, bancos, incluso al Museo Nacional del Cairo, tal como sucedio en Túnez. En Túnez enseguida se sospecho de fuerzas paramilitares del clan de Ben Alí, que pretendían sembrar el caos y el desordén. En Egipto, los ciudadanos, activistas y periodistas temen que el régimen de Mubarak haya encargado a delincuentes comunes y agentes de policía promover este mismo caos para justificar la represión de las protestas y sobre todo para justificarse internacionalmente. De momento más de 5.000 presos convictos han escapado de las prisiones, abandonadas por sus guardas, en lo que muchos ven la complicidad del Gobierno. Curiosamente la policía había desaparecido de las calles y lo único que se interpusó entre el sotano del museo y los saqueadores eran los ciudadanos, unidos, que formaron una cadena a su alrededor par impedir más actos vandálicos.
Esperemos que hoy sea el último día de otro dictador más, que la cadena de revueltas democráticas se extienda por los países donde todavía perviven regimenes feudales, y que en las democracias actuales, se exija un mayor participación de la ciudadania y se produzca una mayor movilización contra la corrupción política, los abusos de poder e influencias, los robos de guante blanco, y sobre todo para defender los derechos fundamentales que recoge la constitución, como son el derecho a vivir dignamente, a tener trabajo y una vivienda, cosas que actualmente se inclumplen totalmente para la gran mayoría. Sólo un 1% de la población mundial no puede imponerse al 99% y eso, este año, se está demostrando en países como Túnez y Egipto. El poder está en gente, y en su unión.
eldardonegro para falsapolitica
Sin duda, mientras Estados Unidos, no tiene más remedio que aceptar estos cambios, e intenta canalizar la revuelta popular, apoyando la democratización. Sólo hay que ver la evolución de sus comunicados en esta semana de revuelta. Han pasado de apoyar al regimén de Mubarak a pedir reformas y pactos con la oposición política a abandonar finalmente a Mubarak pidiendo que se convoquen elecciones. Ahora lo que intentarán será influir en el nuevo gobierno egipcio, para ello ya se han entrevistado con altos cargos del ejército egipcio en el Pentagono y seguramente con líderes de la oposición que ahora intentarán adueñarse de las protestas. Estados Unidos tiene contactos periódicos en el Pentagono con la cúpula militar tanto tunecina como egipcia, así como de la mayor parte del Magreb y del Próximo Oriente por encima incluso de sus dirigentes políticios.
En cuanto a la Unión Europea después de una semana de silencio sepulcral ha decidido pedir con "firmeza" "elecciones libres y justas" tras tres décadas de autoritarismo de Hosni Mubarak. Es decir, lo que diga EEUU. Por supuesto nuestra Trini, Trinidad Jiménez, la misma que apoya a Rabat y desoye a los saharauis pide siete después la democratización egipcia.
Israel, que corre el riesgo de perder a un gran aliado en la región se opone frontalmente a ello. Recordemos que tanto Israel como Egipto (en contra de la opinión pública egipcia) tienen totalmente bloqueada a la Franja de Gaza. Y para justificarse amenaza sobre el peligro de la expansión del islamismo radical. Sin pararse a pensar que precisamente la misería y falta de oportunidades de la gente sometida a un bloqueo brutal provoca una mayor radicalización religiosa, al ser lo único a lo que aferrarse.
Enlaces:
Giant protest to kick off in Egypt (Al Yazzira)
No hay comentarios:
Publicar un comentario