martes, 19 de febrero de 2008

El PP baja su tono electoral para no incitar a la izquierda

La teoría está escrita, aunque la práctica probablemente se encargará de desmentirla. Y la teoría es que el PP debe rebajar el tono de su campaña electoral, "hacerla más plana", dicen algunos responsables del PP, para no movilizar a la izquierda a votar al PSOE.

Es la principal conclusión de varios días de análisis de los últimos sondeos electorales, en especial el del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS), que registra un empate técnico entre ambos partidos. Los análisis los ha llevado a cabo el comité ejecutivo y el comité de campaña del PP, y de ellos deducen que su principal baza no está en su subida electoral, que se plantea muy difícil, sino en impedir que crezca el PSOE, no sólo por el centro, que es donde le disputa el electorado al PP, sino por la izquierda, donde sí que detecta el PP, después de esos estudios, que hay un flujo hacia el Partido Socialista desde las posiciones más de izquierda, en especial Izquierda Unida, y la izquierda nacionalista. Un flujo de votos hacia el PSOE que podría compensar el trasvase de voto de los socialistas a los populares que también demuestra esa encuesta, y que el PP cifra en un 5,1 por ciento; mientras que el trasvase del PP al PSOE, que también existe sería tan sólo del 1,7 por ciento. A estos datos se suma la constatación de que el centro se ha convertido para el PP en un verdadero muro imposible de traspasar, por lo menos eso dicen las encuestas, pese a la política de propuestas que ha intentado poner en marcha el presidente del PP, Mariano Rajoy. Al contrario de lo que le ocurre al PSOE, que tiene dos flancos por los que intentar arañar votos: el centro y la izquierda, el PP sólo tiene uno, el centro, ya que "más a la derecha no hay nada", reconocen las fuentes consultadas. Y el centro se muestra impenetrable. La estrategia, con este escenario, es que si el PP no puede incrementar su bolsa de votos, cortar el flujo de los que recibe el PSOE, y eso sólo puede hacerlo con un discurso que no movilice a esa izquierda que ya votó "socialista" en el 2004, y que todos los estudios de opinión han cifrado en un millón y medio de votos. Los populares están convencidos de que si no existe esa movilización, el PP, con los votos que obtuvo hace cuatro años, resultaría ganador de las elecciones. Y esos votos, los del 2004, cree tenerlos fijos. Es otro dato extraído de las encuestas, en especial la del CIS que ha hecho el PP. El nivel de fidelidad del voto del PP que le permite ser optimista en este sentido es superior al 90 por ciento, aseguran en el PP, mientras que el del PSOE no llega al 80, lo suficiente para que en circunstancias normales, y si no continúa el trasvase de voto de la izquierda al PSOE, los populares puedan hacer que el empate técnico se incline a favor de los populares. Y ese voto se moviliza, se han convencido también, cuando el PP hace un "discurso duro", el del catastrofismo, el de que "España se rompe" y que el Gobierno ha claudicado ante ETA. La izquierda entonces se moviliza ante el temor de que gane el PP. Una campaña con un tono más bajo, sin esas acusaciones del PP que "meten miedo" a ese electorado, le permitirá al PP superar al PSOE en votos y arañar alguno por el centro.
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Así que por este motivo entendemos las últimas declaraciones del Sr. Rajoy donde decia ofrecer concordia y seguridad para todos los españoles frente a la "tensión" y el "dramatismo" de su principal adversario, el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero. Rajoy añadió que no se debe "dividir a la gente" ni ofrecer "tensión ni dramatismo", sino la "moderación, tranquilidad y seguridad" a las que se ha comprometido en su discurso.
Eso si, no dice nada de la crispación que ha provocado su partido desde la oposición y durante los ocho años que estuvo en el poder, sobre todo en la segunda legistatura cuando consiguió la mayoría absoluta. Acabaron su mandato metiéndonos en una guerra ilegal y contra la opinión de la mayoría ciudadana. Esto no deberiamos olvidarlo nunca, los mismos responsables de todo aquello siguen mandando en el Partido Popular, siguen Acebes, Zaplana, Rajoy, Aguirre, Aznar... Mintieron sin ningún tipo de pudor, manipularon y tergirvesaron descaradamente a la opinión pública. No mostraron nigún tipo de escrupulos intentando confundir a los ciudadanos para mantenerse en el poder. El Sr. Aznar llegó a decir tiempo después de perder las elecciones que "ahora sé que no había armas de destrucción masiva" contradiciendo totalmente lo que había dicho anteriormente como presidente del gobierno "tengo informes confidenciales que demuestran que Irak tiene armas de destrucción masiva". Su objetivo era mantenerse en el poder a toda costa y eso no ha cambiado, intentaran obtenerlo de nuevo a toda costa y si lo consiguen no cabe la menor duda que volverían a actuar como actuaron en su momento.
Alzan el grito advirtiéndonos que España se rompe, contra el Estatut de Cataluña mientras en Andalucia ellos mismos lo apoyan, convocan a la gente para defender a la familia contra los gays, el aborto, el divorcio... para no devolver los papeles de Salamanca expoliados durante el franquismo, contra la política antiterrorista del gobierno (mientras cuando ellos gobernaron la oposición les apoyo en todo)... ¿Eso no es crispación?

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